Enemigo Público (y okkupied)
12/12/2023
Ahora que hemos celebrado la Constitución pasándonos la división de poderes por las estalacticas, queria devolver a las recomendaciones una película: Enemigo Público
Le he pedido a Bard, para quien no conozca la película, que haga una reseña. La retoco con algunas ideas para explicar por qué lo traigo por aquí
Enemigo público, la película de 1998 dirigida por Tony Scott y protagonizada por Will Smith, es una obra de ciencia ficción que, a pesar de su antigüedad, sigue siendo sorprendentemente relevante en la actualidad. La película plantea un futuro en el que las cámaras están presentes en todas partes, desde las calles hasta los hogares. Esto permite a las autoridades controlar a la población de forma totalitaria, convirtiendo a cualquier ciudadano en un potencial sospechoso.
La película es un acertado retrato de un futuro posible, en el que la tecnología ha avanzado hasta el punto de permitir a los gobiernos vigilar a sus ciudadanos de forma casi omnipresente. En la actualidad, vivimos en un mundo cada vez más interconectado, en el que las cámaras son cada vez más comunes. Las cámaras de seguridad están presentes en las calles, en los comercios, en los edificios públicos y en los hogares. Las cámaras de vigilancia también están siendo utilizadas por las empresas para rastrear los movimientos de sus empleados y clientes.
-La verdad es que tiene gracia que salgan estas reflexiones de una IA-
La película Enemigo público es un alegato en defensa de la privacidad y la libertad. La película muestra los peligros de un mundo en el que las cámaras están presentes en todas partes. La película plantea la pregunta de hasta qué punto los gobiernos pueden controlar a sus ciudadanos sin violar sus derechos fundamentales.
Una metáfora sobre la vigilancia digital
Pues eso es, la película tiene 25 años y ya vio venir cosas. Es lo que más me gusta de ella. La llegué a tener en VHS, cuando eso se usaba, y no fueron pocas las veces que la reproducí. El otro día la echaron por la tele, y la estuvimos viendo un rato. «No sabía que era de tus favoritas», me dijo mi mujer. «Aunque sí sé de tu debilidad por Will Smith».
Precisamente esta semana tengo clase de protección de datos, y siempre insisto mucho en su relación con la transparencia y la lucha contra la corrupción. Y en que cada semana, todas ellas, aparece una nueva noticia que tiene que ver con el uso de los datos. Una realidad ya presente, muy vinculada con la vigilancia digital.
Y ya que estaba, me dije, voy a recomendar también «Occupied» (serie)
Según destaca FilmA, «En un futuro próximo el ejército de Rusia, con el beneplácito de la Unión Europea y los Estados Unidos, inicia la invasión y ocupación de Noruega, país que ha paralizado la producción de crudo y gas a causa de la crisis del cambio climático ante la falta de recursos. Con esta acción, la Administración Rusa pretende asegurarse el acceso a la explotación petrolífera y gasística de la región»
Del «Deeply concerned» tan comunitario. Del horror de lo innombrable. De ver la politica con otros ojos… cuanto más avanzan las temporadas.
La serie muestra cómo la tecnología se utiliza tanto para el control como para la resistencia (¡uso de videojuegos!) y cómo la extorsión se convierte en una herramienta política. Y da que pensar dada la cantidad de peleles que vemos en nuestros telediarios. Los personaje de la serie noruega se enfrentan a dilemas morales, a amenazas a su seguridad y a su libertad, y a la presión de los intereses económicos y geopolíticos. Occupied plantea cuestiones relevantes para el presente y el futuro de la humanidad, como el impacto del cambio climático, la soberanía nacional, la democracia, el activismo y el periodismo.
Estaba escribiendo todo esto cuando leo… «Empresa estadounidense de vigilancia y reconocimiento facial Clearview AI gana recurso contra el RGPD en tribunal británico».
Pues nada, nos seguimos acercando.