La vida es una barca
Yo, señor, no soy malo pero del vaivén de la vida aprendí. Aprendí de ella, futura artista y viajera de independiente lapicero que primero fue una tímida novia amante de la papiroflexia. Yo le hablaba de proyectos, viajes y muchos together… y ella solo se entregaba a las servilletas del bar. De cuantos delicatessen habrán acabado saliendo barquitos … Leer más