¿Tengo ahora mejor ajedrez?

El capítulo 26 de LHDHP lleva por título A7 y habla de ajedrez. Es un paréntesis en la trama, una introspección del protagonista antes de ir hacia el final del libro…  y me sirve para dar un pequeño homenaje escondido a amigos de la vida real, fundidos todos en el personaje «Thal», que hace metáforas del juego de la vida y el amor, de los enroques y los sacrificios, de los ataques previsibles, de la pérdida de frescura por el cálculo.

¿Tengo ahora mejor ajedrez?, me pregunto cuando me cae en la mano o en la pantalla alguna vieja partidas, anotadas en papel (o PGN) como se tienen que hacer esas cosas, cuando tenía tiempo (eso lo tendré que recuperar en unos años) para pasar un día entero en el Casino jugando partidas de ritmo medio. Y en algunas me digo que sí (las del 98-2000, desde luego). Pero luego… ¿pero luego? ¿Jugar taitantasmil partidas online no me habrá mejorado nada? Me gustaría viajar en el tiempo y retarme a una partida. El Rubén ELO y cerebro veinteañero contra el ELO del canoso perrete classic casi cuarentón. 

Supongo que sí, que ha ido a mejor. En partidas rápidas mejoro, aún me quedan argucias para hacer un digno papel en el Torneo Santa Teresa online de Octubre 2021, muy por encima de lo que debía por rango. Pero en partidas pausadas tengo amigos que han dado un salto enorme de calidad. Y amigas ya con hijos que le dan a esto del escaque y con éxito (Ay, Arpita!) . Y que, y por eso estoy contando todo esto, muchos de ellos se nos van a unir al VII Torneo Trapseia de Ajedrez Online, que acepta jugadores hasta mediados de mes. 

De los seis torneos anteriores aún tenemos en liza una decisiva partida del quinto. De ahí depende el ganador. Y como estoy enlazando torneos y partidas… quiero dejar una de mi buen amigo Dag (en el 98 aún a veces le ganaba) siendo implacable este pasado Otoño en una victoria a la velocidad de la luz en 14 movimientos.

A ver si le aguanto alguna jugada más. Ha sido Dag (del lobby Garcinuño) el que ha pedido que el torneo tenga partidas a menos días por movimiento, así que durará menos que otros. ¿Año y medio o así? Lo veremos.

Como le hago decir a uno de los protagonistas del capítulo «el infierno es un lugar en el que ya sabes cómo hacer la partida perfecta». Mientras tanto, juguemos, investiguemos, perdamos y ganemos. A mover piezas.