Verano 24 (III) – Una partida a Kasparov
Supongo que algún día aparecerá en alguna caja, espero que no lo tiráramos. Aunque era un milagro que durara años, porque las piececitas eran muy muy pequeñas. Y el cierre no era una caja a prueba del profesor de la Casa de Papel, precisamente. Pero aguantaba, vaya que sí. Menudas peleas nos hemos echado Gary y
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